Adrián Martínez Bojko, próximo artista que expondrá en la Galería del Boulevard, nos da la bienvenida con una advertencia: dice que dicen que habla mucho, sin embargo, no nos molesta. Por lo contrario, queremos escuchar qué tiene para contarnos este artista argentino, actualmente radicado en Punta del Este, donde disfruta su vida llena de espacio y tiempo.
¿Por dónde empezar? Por sus raíces quizás… Su abuelo era ebanista, un inmigrante ucraniano forzado con criterios propios como para guiarle a la hora de dibujar, leerle Dostoievsky y hablarle de un mundo lejano, distinto, con nieve. Su padre artesano del cuero y él un chico de barrio, de cuando aún había terrenos baldíos.
No tuvo maestros, salvo en sus años de estudio en Bellas Artes. “El conocimiento plástico para mí no es excluyente, en el proceso de mi trabajo y en la matriz de lo que hago”, considera.
Hizo escenografías para cine, teatro, TV y publicidad. Además es muralista.
Mientras toma su café con leche va y vuelve en anécdotas, ideas, destello de una filosofía de vida muy clara, confusa, directa e indirecta, intensa, caótica y feliz en dulces cuotas. Adrián dice que huye de lo que está armado, y sin embargo, su casa en Punta del Este presenta un orden innegable, mezcla de obsesiones y placeres. Es un tire y afloje, como la vida misma que no te da tregua en paradojas.
Para organizarnos, le pedimos que nos conteste unas preguntas:
¿Cuáles fueron tus inicios en el arte?
Desde mi infancia más precoz, la plastilina, la témpera y los clásicos ejercicios del jardín de infantes siguen vigentes en mi todavía. El taller de carpintería de mi abuelo con todas sus herramientas -que yo convertía en seres imaginarios y así le dañaba gubias y otros enceres- después el de mi padre, lleno de cueros, tintas y matrices de bronce con motivos diversos (escenas gauchescas o guardas florentinas) ambos espacios de exploración y juego para mí en ese entonces.
¿Cómo ves a la evolución de tu obra desde ese entonces hasta ahora?
Bueno creo que seguí un camino con cierta lógica: de lo figurativo a la abstracción. Una síntesis seria MENOS ES MAS.
¿Cuáles consideras fueron tus grandes logros en el arte?
Como ya dije menos es más, ir descartando "equipaje", ir más liviano, experimentar esto en mi cotidiano incluso. Descubrir, disfrutar del proceso, divertirme, alejarme bastante del concepto psicoanalitico, del artista sufriente, trabajar más allá del conflicto.
También algunos trabajos escenográficos por encargue me dieron placer, sobretodo porque fueron hechos en equipo.
Aunque hoy lo que me parece un gran logro es el método de auto reciclaje que aplico en mi obra y en mi persona.
(Nosotros sumamos a sus logros: su obra forma parte de colecciones privadas en Estados Unidos, Italia, Francia, Espala, Australia, Inglaterra, México, Brasil, Chile, Uruguay, Colombia, Canadá, Bélgica y Argentina… si sigue así conquistará al mundo).
¿Cómo definirías tu estilo?
Orgánico, latino, rustico y algo psicodélico. En cuanto al estilo, creo que es trabajo de los críticos que todo lo convierten en algo, yo prefiero esquivar esa instancia; del mismo modo que ponerle nombre a una obra.
¿Qué te inspira?
Los amigos, la música, la fauna y la flora, los libros, la historia, los años 60 y 70, el OP ART y el POP, los sueños, los textiles en general, en especial África y América, el animismo, los oficios, la mañana y la noche.
¿Quiénes son tus referentes?
Referente me suena a nombre. Miles Davies, Klimt, Durero, Rauschenberg, los aborígenes americanos, África, Jobim, Los Beatles, y muchos seres anónimos…
En su casa de La Barra recibe a todos, y que una abuela recién operada de la cadera suba su escalera para ver su obra tiene para él un valor similar a un premio prestigioso. El contacto directo vale todo.
El viernes 29 de julio, Adrián presentará su nueva obra con una muestra en la Galería del Boulevard, obra que está produciendo en Buenos Aires especialmente para la ocasión, aunque hay algunas que atravesaron la aduana, confirma divertido. Básicamente telas.
Y Adrián estará llevando la experiencia del próximo viernes un paso más allá. Estará pintando en vivo, acompañado por Juampi Juárez, amigo y talentoso músico de jazz que aportará sus propias texturas auditivas. Después de conocer tan fascinante historia, ¿se lo van a perder?